En 20 minutos: tu presión sanguínea volverá a ser normal.
En 8 horas: los niveles de monóxido de carbono (gas tóxico) en tu corriente sanguínea bajarán a la mitad y los niveles de oxígeno volverán a ser normales.
En 48 horas: tus probabilidades de tener un ataque cardíaco comenzará su largo descenso. Toda la nicotina habrá dejado tu cuerpo. Tu sentido del gusto y del olfato volverán a niveles normales.
En 72 horas: tus bronquios se relajarán y tu nivel general de energía aumentará.
En 2 semanas: tu circulación aumentará y continuará mejorando durante las siguientes diez semanas.
En 3 - 5 meses: problemas de tos, sibilancias (sonido silbante y chillón durante la respiración al pasar el aire a través de vías respiratorias congestionadas) y problemas de respiración se irán disipando al mejorar la capacidad pulmonar en un 10%.
En 1 año: tu riesgo de sufrir un ataque al corazón habrá disminuido a la mitad.
En 10 años: tu riesgo de contraer cáncer de pulmón habrá vuelto a ser igual al de un no fumador.
En 15 años: el riesgo de que te dé un ataque al corazón habrá vuelto a ser igual al de un no fumador.
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